Valve ha actualizado sus políticas para prohibir la inclusión de anuncios en juegos gratuitos dentro de Steam. A diferencia de las prácticas comunes en dispositivos móviles, la plataforma no permitirá que los desarrolladores utilicen publicidad paga como fuente de ingresos.
Según la compañía, los juegos no podrán forzar a los jugadores a ver anuncios comerciales ni a interactuar con ellos para continuar jugando. Asimismo, se eliminará la posibilidad de ofrecer recompensas a cambio de visualizar publicidad, una estrategia habitual en los títulos para móviles.
Con esta medida, Valve refuerza su compromiso de ofrecer una experiencia de juego más limpia y libre de interrupciones, diferenciándose de otras plataformas que dependen de este modelo de monetización.