En 1981, se lanzo en una de las maquinas arcades icónicas en la industria de videojuegos. Los principios de Mario, Donkey Kong y Pauline, se volvieron populares rapidamentes y fueron uno de los pioneros en el mundo de los juegos platformers. Con plataformas y escaleras, el propósito era llegar hacia Donkey Kong, superar los obstáculos y rescatar a Pauline. Bastante sencillo y rápido, siempre y cuando el obstáculo no trabaje junto con otro obstáculo (te estoy mirando PAC-MAN). Este juego lanzado recientemente es prácticamente lo mismo.
Castle Kong mantiene su gameplay bastante sencillo y fácil de entender, pero mantiene una curva de dificultad bastante elevada. Al principio, parece que entiendes los niveles a simple vista, hasta que vuelves a repetir los niveles por cada “Nivel Escalera” que superes. ¿A que me refiero? Cuando llegas a cierto punto, el juego te sube la dificultad, reinicias desde el principio y te añade mas niveles para incrementar la dificultad. El juego se puede ver fácil, pero es más bien un obstáculo difícil de terminar.
En varios aspectos, el juego es interesante. Muchos de los elementos de enemigos y obstáculos son nuevos y no se han visto en Donkey Kong cuando salió. Ademas de eso, la dirección del arte, aunque se ve 2D, la calidad del arte es bastante limpia y atractiva para este tipo de juego. El sonido es bastante calmante y no pone presión al jugador, la cual es una buena estrategia en diseño para evitar que los jugadores se enojen o se alteren mas rápido.
Pero lamentablemente las cosas buenas terminan ahí, ya que el juego es prácticamente una versión moderna de Donkey Kong y su contenido prácticamente es repetitivo con un obstáculo añadido en cada versión de un nivel. Y por repetitividad, el juego en si puede ser muy aburrido después de cierto tiempo. Esto no es decir que no es bueno para jugar, pero prácticamente llegaras al nivel que diras “No Mas” y dejaras el juego ahí.
El score que le daría al juego seria un 6/10. Sobre el nivel medio, pero como prácticamente es una versión moderna de Donkey Kong, el juego se vuelve repetitivo y llega a un punto de cansancio. Pero es un juego bueno para pasar un poco de tiempo.